El Desafío del Consumo en Argentina: Análisis de la CAME
El panorama del consumo en Argentina enfrenta retos significativos, según las recientes declaraciones de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). El secretario de prensa, Salvador Femenía, advirtió que el consumo no muestra signos de recuperación, encontrándose en una situación muy amesetada y complicada. Este contexto plantea interrogantes sobre la viabilidad de las pequeñas y medianas empresas en el país.
Con una rentabilidad muy reducida, los comerciantes lidian con dificultades para cubrir costos fijos que continúan en aumento. Esta situación se ve agravada por la disminución del poder adquisitivo de los consumidores, un factor clave en esta crisis de consumo.

La Realidad del Consumo en Tiempos Difíciles
El análisis de Femenía es claro: después de un breve rebote a finales de 2024 y en el primer trimestre del año, el consumo ha vuelto a caer. Este descenso se produce en un contexto donde ya se habían registrado bajas superiores al 7% en comparación con el año anterior. La situación actual es crítica, caracterizada por caídas sucesivas que reflejan un mercado estancado.
Desde la CAME, se enfatiza que la rentabilidad sigue siendo un tema candente. La carga impositiva se mantiene constante, pero los márgenes de ganancia son cada vez más estrechos. Como resultado, muchos comerciantes se encuentran en una encrucijada, luchando por amortizar costos que no cesan de aumentar, especialmente debido a las actualizaciones de tarifas.
La Disponibilidad Económica de los Consumidores
Femenía también destacó un problema crítico: el 50% de los argentinos no logra llegar a fin de mes. Esta realidad limita la capacidad de los consumidores para aprovechar ofertas o planes de cuotas, dejando a los comerciantes en una posición vulnerable. La falta de dinero en el bolsillo se convierte en el verdadero obstáculo para la reactivación del consumo.
Además, se señala que las promesas del gobierno sobre el alivio de la presión impositiva no se han materializado. En lugar de ello, la carga impositiva ha aumentado con la introducción de nuevos impuestos, lo que agrava aún más la situación. Esta estructura fiscal, según Femenía, no solo incrementa los precios finales, sino que también contribuye a la caída del consumo.
Perspectivas de la Industria
Un informe del Instituto de Industriales Pymes Argentinos (IPA) resalta la preocupación del sector industrial. Aunque se observa un ligero crecimiento económico, este no se traduce en un aumento del consumo ni en la creación de empleo. La base de este crecimiento es frágil, impulsada principalmente por sectores como el agro y el petróleo, mientras que la industria y el consumo permanecen rezagados.
La baja inflación no ha logrado estimular la demanda de los consumidores, y el crecimiento de las reservas se debe más a la deuda que a las exportaciones. La situación de las pequeñas y medianas industrias sigue siendo crítica, con una recuperación que aún no se siente en la vida cotidiana de la mayoría de los hogares.
La Ruta a Seguir
La situación del consumo en Argentina plantea serios desafíos tanto para comerciantes como para consumidores. Es urgente un enfoque integral que promueva no solo la estabilidad económica, sino también un aumento real en el poder adquisitivo. ¿Cómo pueden el gobierno y la industria trabajar juntos para revertir esta tendencia? Es fundamental que todos los sectores se unan en la búsqueda de soluciones efectivas.
Te invitamos a reflexionar sobre estas problemáticas y a explorar más sobre cómo puedes participar en la búsqueda de alternativas que beneficien a la economía local. ¡Comparte esta información con quienes puedan interesarse y únete a la conversación sobre el futuro del consumo en Argentina!